PROPUESTA DE INCLUSIÓN DEL ECOCIDIO EN EL CÓDIGO PENAL FEDERAL DE MÉXICO
El pasado 30 de julio, conforme figura en el Boletín No. 4723 de la Cámara de Diputados, la diputada Karina Marlen Barrón Perales (PRI) propuso adicionar un artículo 417 Bis al Código Penal Federal de México, para imponer de 10 a 15 años de prisión y de mil a mil 500 días multa, al que cometa “cualquier acto ilícito o arbitrario perpetrado a sabiendas de que existen grandes probabilidades de que cause daños graves que sean extensos o duraderos al medio ambiente.”
La propuesta, que se basa literalmente en la Definición Jurídica de ecocidio proporcionada por el Panel de Expertos convocados por la Fundación Stop Ecocidio en 2021, ha sido turnada a las comisiones de Justicia para dictamen, con opinión de la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
La iniciativa resalta, entre otras cosas, que es fundamental para el país reconocer la figura del ecocidio porque “los responsables de los actos criminales en contra de la biodiversidad podrán ser juzgados y evitar que este hecho quede impune” y considera que no habrá resultados efectivos sino se hace a través del sistema legal federal, “para que su aplicación sea tal cual y con ello salvaguardar la flora y fauna (biodiversidad) nacional.”
Entre los problemas más graves que afectan al medioambiente en México que son señalados en el documento se encuentran la contaminación, la deforestación, la basura, el calentamiento global y la fractura hidráulica (o fracking).
En base a ello, la diputada Barrón Perales argumentó que “la destrucción del medio ambiente ha ocasionado lamentables repercusiones en todos los ecosistemas y la biodiversidad se ha visto afectada gravemente, por lo que algunas especies se han extinguido y otras se encuentran en peligro de extinción.” Y continuó diciendo que “Algunos estados o ciudades tienen una grave contaminación del aire […] También hay una grave contaminación del agua de los ríos, mares y lagos, y […] Los seres humanos se han visto afectados en su salud por los problemas ambientales con enfermedades de las vías respiratorias, gástricas y dermatológicas; además, con padecimientos graves en los riñones, estómago o cáncer.”
Por todo ello, la diputada finalizó con estas palabras, “Dejemos de ser omisos con la destrucción del medio ambiente. Es momento de reaccionar y señalar estos errores en nuestra legislación para que sean castigados con la gravedad de lo que esto implica. No dejemos que continúen en la impunidad.”
Por su parte, Rodrigo Lledó, director de Stop Ecocidio Américas, miembro del Panel de Expertos Independientes para la Definición jurídica del ecocidio, ha señalado:
“Este proyecto se suma al que ha presentado Brasil el pasado mes de junio. Proyectos similares se están preparando en Argentina, Chile y otros países de América Latina. Para proteger adecuadamente el medioambiente, es necesario que el ecocidio se convierta no sólo en un crimen internacional sino también en un crimen tipificado en las legislaciones nacionales.”
Para Jojo Mehta, Cofundadora y Directora de Stop Ecocidio Internacional, "Es una noticia emocionante que viene de México. Se está produciendo un gran impulso en todo el mundo: en los últimos meses, hemos visto proyectos de leyes de ecocidio en distintas fases de propuesta en la Unión Europea, Brasil, los Países Bajos, Escocia, España y Bélgica (donde el Gobierno está tan sólo a la espera de la aprobación parlamentaria). Es evidente que los dirigentes de todo el mundo están empezando a darse cuenta de los peligros reales a los que nos enfrentamos, y se está haciendo evidente la necesidad de una fuerte orientación legislativa.
Es sólo cuestión de tiempo que sea aceptada la protección jurídica aplicable a los daños medioambientales graves y extensos o duraderos como un paso necesario hacia un mundo más seguro... por una masa crítica de naciones, a nivel regional y, de hecho, en la Corte Penal Internacional."