Cuando las leyes y los reglamentos son claros, las empresas pueden gestionar con éxito el riesgo y planificar con confianza. El saber dónde se encuentran los límites de una práctica empresarial segura facilita el compaginar el deber de maximizar los beneficios con el mantenimiento de un negocio saludable; y los inversores, las compañías de seguros y los accionistas también saben esto.
En la actualidad, las empresas que encabezan las prácticas sostenibles están en desventaja competitiva. El establecimiento de una barrera que marca lo que es legal y moralmente aceptable hace que las mejores prácticas aumenten a la par que crea unas condiciones equitativas para las empresas sostenibles y recompensa a quienes hacen lo correcto.
Los parámetros claros dan rienda suelta a la creatividad. Gracias a ellos, las empresas se verán estimuladas a plantearse las preguntas correctas, la demanda podrá volver a equilibrarse alejándose de los bienes creados mediante prácticas nocivas y, por último, los recursos y el talento se dirigirán hacia el desarrollo de nuevos modelos empresariales regenerativos que funcionen en armonía con la naturaleza.
Cuando los canales destructivos se hayan cerrado, la inversión y los seguros se desplazarán de forma natural a favor de los proyectos sostenibles. La política y las mejores prácticas seguirán el ejemplo.
Cuando trabajemos con la naturaleza en lugar de ir contra ella, las operaciones empresariales serán más eficientes y eficaces.
Conforme se exploren nuevos enfoques para trabajar en mayor armonía con la naturaleza gracias al nuevo marco jurídico, se producirá un mejor aprovechamiento de la experiencia y de los conocimientos sobre el terreno que tienen los trabajadores. El compromiso, la motivación y la satisfacción de las personas empleadas mejorarán considerablemente.
Tener establecidas en la ley unas responsabilidades claras hace que la injusticia climática y medioambiental pueda ser frenada en su origen, proporcionando una guía hacia una mayor equidad y una cultura del cuidado y garantizando que aquellos que toman las decisiones clave asuman sus responsabilidades.
La ley del ecocidio favorecerá y fomentará modelos empresariales que funcionen en armonía con un medio ambiente próspero y en evolución, sustituyendo así un periodo económico severo y destructivo por otro ético y regenerativo.
EMPRESAS Y FINANZAS - CARTA ABIERTA
Las empresas, las finanzas y los gobiernos tienen una oportunidad única para responder al colapso climático y ecológico.
Si actuamos unidos ahora para que los responsables de prácticas destructivas ilegales o gratuitas rindan cuentas, podremos crear formas mejores y más justas de hacer negocios que estén firmemente respaldadas por los marcos jurídicos internacionales.
LAS EMPRESAS QUE APOYAN SON:
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EL INFORME "RACE TO ZERO" RECONOCE QUE LA LEY DEL ECOCIDIO ES UN FACTOR CLAVE PARA LA ACCIÓN CLIMÁTICA
La legislación en materia de ecocidio ha sido destacada de forma significativa en el informe Race 2 Zero "Pivot Point" sobre la importancia de pasar de medidas voluntarias a reglamentarias para acelerar la acción por el clima.
El informe, presentado a bombo y platillo durante la Semana del Clima de Nueva York y la semana de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, en el Foro Climate Action: Race to Zero y Race to Resilience, en el que participaron los Climate Champions de la COP26 y la COP27.
Contiene una sección importante sobre la ley de ecocidio como "impulsora e influyente" en este proceso - ver Capítulo 7 sección (c) del informe (p58).
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